Proyectar una ciudad segura desde el inicio
El caso de la Whitehill & Bordon Regeneration Company se ha convertido en un ejemplo de cómo planificar la seguridad urbana desde el diseño mismo. La transformación de un predio de 200 hectáreas en una nueva ciudad con 2.400 viviendas y un centro urbano vibrante implicó un enfoque security-by-design. Desde el inicio se integraron cámaras de videovigilancia en red, audio IP y sistemas de analítica avanzada, todos gestionados desde un centro de control centralizado.
El objetivo era proteger personas, comercios y activos con un sistema escalable y sostenible. La ciberseguridad y la eficiencia energética se establecieron como requisitos fundamentales. Este enfoque permitió que la seguridad no se pensara como un complemento, sino como un componente estructural del proyecto urbano. Así, la infraestructura está preparada para crecer por fases sin comprometer la continuidad de servicio.
De los desafíos a la solución
La nueva ciudad debía dar respuesta a una mezcla de espacios residenciales, zonas comerciales y lugares de encuentro. Esto demandaba un sistema con operación continua, baja latencia y capacidad de reacción inmediata frente a incidentes. Además, debía ser lo suficientemente flexible para acompañar la expansión de la ciudad y cumplir con estrictos estándares de privacidad.
La solución adoptada incluyó todo un set de soluciones AXIS Communications: cámaras de red de alta resolución que funcionan incluso en condiciones de baja iluminación, altavoces IP para la disuasión y el envío de alertas en eventos masivos, y analíticas capaces de medir con precisión el flujo de visitantes. Estos datos aportaron no solo seguridad en el día a día, sino también inteligencia para la planificación urbana, como la decisión de sumar nuevos espacios culturales y gastronómicos.
El soporte de red, basado en switches, puentes y un software de gestión robusto, garantiza estabilidad en escenarios de alta demanda. A esto se suma la implementación de buenas prácticas de ciberseguridad, como segmentación de redes, contraseñas robustas y actualizaciones regulares de firmware.
Inspiraciones internacionales
Whitehill & Bordon se entiende mejor en el marco de otras experiencias internacionales. En Duluth, Estados Unidos, el histórico Aerial Lift Bridge utiliza Axis Camera Station y cámaras PTZ para coordinar el tránsito marítimo y vehicular. La clave es la resiliencia: un sistema capaz de seguir funcionando de manera autónoma incluso cuando la conectividad principal falla.
En Finlandia, la colaboración entre Wapice y Axis mostró cómo las ciudades pueden gestionar datos de manera responsable. Allí, las cámaras funcionan como sensores que alimentan plataformas de analítica, con mecanismos de anonimización y ciberseguridad certificados. Esto demuestra que la escalabilidad también puede lograrse desde el software.
Finalmente, en Windsor, Canadá, la integración de radares y cámaras biespectrales permite gestionar miles de buques en un canal internacional. La capacidad de verificar visualmente situaciones críticas a grandes distancias refuerza la idea de que la combinación de sensores es esencial para anticipar riesgos.
Privacidad como pilar de la videovigilancia moderna
La protección de la privacidad se ha convertido en un aspecto central en cualquier despliegue de videovigilancia urbana. Las ciudades necesitan equilibrar la seguridad con el cumplimiento normativo, especialmente en espacios públicos donde se manejan datos sensibles. Aquí se destacan soluciones como AXIS Live Privacy Shield, una aplicación en la cámara que aplica en tiempo real enmascaramiento dinámico mediante IA.
Esta tecnología permite difuminar rostros, matrículas o incluso fondos completos, tanto en grabaciones en vivo como en video almacenado. Con ello se garantiza que la videovigilancia cumpla con regulaciones de protección de datos sin sacrificar la capacidad operativa. Además, es flexible: se pueden definir zonas de exclusión, elegir qué elementos enmascarar y qué nivel de detalle mostrar, e incluso desactivar el enmascaramiento en caso de incidente.
El hecho de que se trate de una solución en el borde (edge-based) hace que no requiera servidores adicionales y que pueda escalarse de manera sencilla en grandes proyectos urbanos. Es gratuita para cámaras Axis compatibles y aporta valor agregado inmediato, ayudando a responder a regulaciones que restringen el uso de videovigilancia en lugares sensibles como hospitales, escuelas, hoteles o espacios gubernamentales. En contextos como el de Whitehill & Bordon, donde la transparencia y la confianza ciudadana son fundamentales, incorporar este tipo de herramientas se vuelve clave.
Building Networks, como Axis Solutions Gold Partner en Argentina, aporta valor diferencial integrando soluciones avanzadas como Live Privacy Shield, videovigilancia, audio IP y control de accesos dentro de una plataforma convergente como CamScope, con más de una década de experiencia en proyectos de seguridad urbana e infraestructura crítica.
Qué observar y cómo medir resultados
Para evaluar el impacto de una solución de esta magnitud, resulta clave apoyarse en métricas que traduzcan la efectividad operativa y el valor para la comunidad. Entre las más relevantes se encuentran:
– Tiempo de respuesta ante incidentes, medido en minutos y con percentiles P50 y P90 para identificar picos.
– Eventos gestionados con audio IP, analizando el nivel de disuasión efectiva frente a potenciales incidentes.
– Disponibilidad del sistema, expresada como porcentaje de SLA, incluyendo caídas y sus causas.
– Uso real de espacios públicos, comparando el conteo de personas con las estimaciones iniciales por franjas horarias.
– Eficiencia energética, medida en consumo por cámara y en el total frente a una línea base de referencia.
– Gestión de actualizaciones de seguridad, registrando el tiempo promedio en días hasta aplicar parches y firmware.
– Incidentes de privacidad, con reportes ante la AAIP, reclamos recibidos y resoluciones aplicadas.
Estas métricas no solo fortalecen la operación diaria, sino que permiten comunicar a ciudadanos e inversores que la ciudad se construye con datos confiables y no con percepciones. De este modo, se genera confianza y legitimidad.
El marco normativo local
En Argentina, la Ley 25.326 de Protección de Datos Personales establece que las imágenes capaces de identificar a una persona constituyen datos personales y deben tratarse bajo principios de legalidad, finalidad y proporcionalidad. La Disposición DNPDP 10/2015 regula específicamente la videovigilancia, exigiendo cartelería visible, proporcionalidad en el tratamiento y límites en la retención de datos.
Incorporar estas obligaciones en el diseño de proyectos urbanos no es una barrera, sino una oportunidad para reforzar la transparencia. Señalización adecuada, anonimización de datos cuando la identificación no es necesaria y auditorías de acceso son prácticas que permiten cumplir con la ley y fortalecer la confianza ciudadana.
Impacto operativo y de negocio
El caso Whitehill & Bordon demuestra que la seguridad urbana no debe considerarse un gasto, sino una inversión estratégica. Los beneficios incluyen continuidad operativa en eventos masivos, toma de decisiones basada en información confiable, mejor experiencia para los ciudadanos y optimización de costos gracias a la eficiencia energética y a una arquitectura tecnológica escalable.
Preguntas frecuentes
¿Cómo se protege la privacidad en espacios públicos?
Se utilizan mecanismos de anonimización en cámara, cartelería visible y controles de acceso diferenciados, en línea con la Ley 25.326 y la Disposición 10/2015. Además, aplicaciones como AXIS Live Privacy Shield permiten enmascarar rostros, matrículas o fondos de manera dinámica y en tiempo real.
¿Qué ocurre si se interrumpe la conectividad?
El sistema puede incluir un software de gestión local con capacidad autónoma y sincronización posterior, como en el caso de Duluth.
¿Es posible comenzar con un despliegue reducido y ampliarlo luego?
Sí. La arquitectura modular permite iniciar en zonas críticas, validar resultados y escalar gradualmente sin comprometer la seguridad ni la inversión inicial.